jueves, 8 de julio de 2010

La importancia de las redes

La fuerza de la costumbre nos lleva a repetir una y otra vez lo que hacemos, aunque existan dudas razonables sobre su utilidad. Algo de eso ocurre con los métodos y técnicas formativas, muchas de las cuales han demostrado ser muy poco efectivas para producir cambios reales en el desempeño profesional ,pese a lo cual seguimos utilizándolas sin medida. Por ejemplo, las revisiones sistemáticas de la   Cochrane , y en especial el famoso trabajo de Bero y cols hace más de 10 años, nos permitieron saber  que las clases tradicionales ( en las que el alumno se limita a escuchar) o la mera diseminación de materiales impresos  ( guías,protocolos,algoritmos...)  son estrategias generalmente inefectivas para producir cambio. Pese a la "evidencia", clases y protocolos siguen siendo instrumentos ampliamente utilizados en todas las organizaciones.
Otra estrategia de moda ha sido la llamada formación en cascada o Formación de Formadores.Es decir, formar a unos expertos para que a su vez formen a otros profesionales de la organización,. En un precioso trabajo publicado hace unas semanas en el Social Science and Medicine por el grupo holandés de Erik Jippes de la Univeridad de Groningen, deciden comparar el efecto de un programa intensivo de Formación de formadores con el que tiene la mera estructura de las redes sociales ( fuertes y débiles )  de los médicos a la hora de implantar una determinada innovación,. En este caso se trata de una innovación educativa,  como es la realización de la evaluación de las competencias profesionales  de los residentes y el correspondiente feed back a los mismos.
Las conclusiones del estudio son interesantes: el factor que más influye en la diseminación en la organización de una nuevas técnica ( en este caso la evaluación y feed back a los residentes) es el entramado de redes socilaes ( fuertes, pero también débiles) que existen entre los profesionales.En mayor grado que la formación : un curso reglado de 2 a 6 días de Formación de Formadores no consigue producir el mismo efecto, aunque aumente los conocmientos y habilidades de los participantes.
Una cosa es realizar un curso, que sirva además para la carrera y los puntos de las oposiciones, y otro bien distinta, que eso sirva para cambiar nuestra conducta profesional. Y para ésto la influencia que tienen nuestros pares, con los que formamos redes informales y a menudo inconscientes de lo que llaman los autores " amigos y enemigos", pueden ser mucho más decisivas a la hora de que al final implantemos o no una dteeerminada innovación.
No es un problema menor si analizamos las cifras de dinero invertido en formación. 

4 comentarios:

  1. Creo que adolecemos de cursitis, creada por la necesidad de acumular formación para la carera profesional y las oposiciones. El sistema de transmisión de conocimientos no cambia en la universidad ni en los hospitales. La "chapa clásica" es el estándar hoy en día ¡que pena¡

    ResponderEliminar
  2. Cierto de principio a fin... Los métodos clásicos de aprendizaje y difusión de innovaciones en las organizaciones está anticuado y cada vez sirve de menos, excepto para la titulitis.

    Todo cambiara algun dia, ¿verdad?

    ResponderEliminar
  3. Estupenda reflexión para todos los que nos dedicamos a esto de la formación.
    Es curioso. En realidad este artículo lo que añade de nuevo respecto a lo que hay en la literatura sobre evidencias de los distintos modelos de intervención educativa sobre la práctica profesional (o al menos lo que yo conozco del tema) es la comparación entre una estrategia habitualmente seguida por las unidades de formación continuada de los servicios de salud, como es la formación de formadores, con otra línea de diseminación de la información que es, con matices, la que emplea la industria farmacéutica. Llegan con algo de retraso las conclusiones: la industria ya conocía ésto hace muchos años, lo ha puesto en marcha desde entonces y los beneficios que ha obtenido son numerosos. Como en casi todo, vamos muy atrasados en la adminsitración...
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  4. Me ha encantado el tema y su planteamiento, pero tengo que corregir al "Gavilán", no se refiere al modelo utilizado por la industria de seleccionar "expertos", a mi juicio se refiere al intercambio de conocimiento verbal y no verbal entre pares.
    Es clásico el estudio que demuestra que entre pares de orígenes diferentes, al cabo del tiempo hacen todos las cosas de forma similar sin acuerdo previo.
    Es algo similar a la menstruación en un grupo de mujeres, en las que transcurrido un tiempo todas la presentan en las mismas fechas.
    Todo ello no hace sino poner de manifiesto la hipótesis de los "memes" en el intercambio de habilidades, conocimientos y actitudes.
    Ha Prometeo y Miguel decirles que lo que han conocido y viven con dolor tiene fecha de cadicidad y a hoy mismo ya ha perdido todas sus justificaciones.

    ResponderEliminar