tag:blogger.com,1999:blog-7866481864126764115.post3351789931880700746..comments2024-02-23T21:58:19.230+01:00Comments on El Gerente De Mediado: A vueltas con Porter…y su abrelatasSergio Minuéhttp://www.blogger.com/profile/16156841778775761635noreply@blogger.comBlogger4125tag:blogger.com,1999:blog-7866481864126764115.post-16581551425536199072015-10-14T12:46:28.409+02:002015-10-14T12:46:28.409+02:00Muchas gracias Javier
Lo del coachingado me parece...Muchas gracias Javier<br />Lo del coachingado me parece una idea brillante, un enfoque del caiching con leve acento mexicano<br />Otra de las ocurrencias ridiculas a las que tan aficionados son algunos gestores modernos<br />Sergio Minuéhttps://www.blogger.com/profile/16156841778775761635noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7866481864126764115.post-13819842555285722402015-10-14T09:54:30.589+02:002015-10-14T09:54:30.589+02:00Desconocía la existencia del Sr. Porter. Por ello ...Desconocía la existencia del Sr. Porter. Por ello agradezco mucho tanto este post, como el anterior que suscitó este comentario de Vicente Ortún y que nos muestra a Porter como gurú.<br />Tal como parece sugerirse aquí, de asociarse a lo que sería un maestro espiritual hindú, el término “gurú” ha pasado a reflejar el dominio de un saber mucho más pragmático o, más bien, de un saber convencer de algo que no siempre responde a la realidad.<br />En cierto modo, nos movemos en Medicina en un mundo que cada día se parece más al del espectáculo (que incluiría futbolistas, modelos, artistas de cine e incluso tanto famosillo del cotilleo del corazón o de realities). Parece que estamos necesitados de dogmas y de alguien que los sepa enunciar aunque, como tales, sean objeto de mera creencia inmune a toda discusión. Y, para ello, como indica Ortún, tenemos la medida de la gran “audiencia”, la de internet, mediante lo que el autor llama tan acertadamente “liguillas”.<br />Estamos ante una jerarquía de vendedores (la Medicina ha pasado ya a concebirse como mercancía por parte de mucha gente) que, en muchos ámbitos, lo son sólo de humo.<br />Leyendo este post, no me sorprende ya que en mi propio hospital se hagan cursos de persuasión y que concurra a ellos un público entusiasmado. Y es que nada como saber mostrar asertividad, dominio de sí, ser “coachingado”, etc. para poder acceder a una jefatura de servicio o a una dirección de procesos (qué nombre). Como se lleva diciendo muchos años, “hay que saber venderse”. Uno pasa de ser sujeto a la condición de objeto que vende o que es vendible y, en tal caso, el saber que pueda ofrecer pasa a un plano muy inferior al de la propaganda del mismo. Se legitima así a la vez la aspiración de muchos mediocres a ser acólitos aventajados de estos grandes sacerdotes o gurús. En cierto modo, cuando un gurú de estos habla, retornamos a aquel dicho eclesiástico: “Roma locuta, causa finita”. Así nos va. <br />Javier Peteiro Cartellehttps://www.blogger.com/profile/17813776051750733758noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7866481864126764115.post-17226490040582596832015-10-10T20:59:38.798+02:002015-10-10T20:59:38.798+02:00Muchas gracias a ti Vicente. Es un lujo poder aloj...Muchas gracias a ti Vicente. Es un lujo poder alojar tus siempre brillantes comentarios<br />Las dos aclaraciones creo que son muy pertinentes para facilitar la comprensión del texto<br />Un saludo muy cordial<br />Sergio Minuéhttps://www.blogger.com/profile/16156841778775761635noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7866481864126764115.post-51828667349946007112015-10-10T13:25:57.515+02:002015-10-10T13:25:57.515+02:00Muchas gracias Sergio por hacerte eco del comentar...Muchas gracias Sergio por hacerte eco del comentario en tu valioso blog. Debería haberlo escrito mejor explicando tal vez que el río Charles separa, en su último tramo, Cambridge de Boston hallándose la Facultad de Economía de Harvard (la de Amartya Sen) en su margen izquierdo y su Escuela de Negocios en el derecho. 1,5 Km entre ambas.<br /><br />Incluso tampoco debería dar por supuesto el conocimiento del chiste del economista y el abrelatas. Un economista, un ingeniero y un químico naufragan en una isla desierta, muertos de hambre, y se encuentran una lata de sardinas. Después de varios infructuosos ejercicios de ciencia aplicada por parte del ingeniero y del químico que intentan abrir la lata, ambos se volvieron irritados hacia el economista, que les había estado observando todo el tiempo con una sonrisita en los labios, y le preguntan:<br />- Pues bien, ¿que harías?<br />A lo que el economista respondió exponiendo una teoría que comenzaba:<br />- Supongamos que tenemos un abrelatas...Vicente Ohttps://www.blogger.com/profile/02380106585849635627noreply@blogger.com