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viernes, 30 de mayo de 2014

Aplicación práctica de la ley del embudo

 Ellos se declararon patriotas.
En los clubs se condecoraron
y fueron escribiendo la historia.
Los Parlamentos se llenaron
de pompa, se repartieron
después la tierra, la ley,
las mejores calles, el aire,
la Universidad, los zapatos.
Su extraordinaria iniciativa
fue el Estado erigido en esa
forma, la rígida impostura.
Lo debatieron, como siempre,
con solemnidad y banquetes,
primero en círculos agrícolas,
con militares y abogados.
Y al fin llevaron al Congreso
la Ley suprema, la famosa,
la respetada, la intocable
Ley del Embudo.
Fue aprobada.
Para el rico la buena mesa.
La basura para los pobres.
El dinero para los ricos.
Para los pobres el trabajo.
Para los ricos la casa grande.
El tugurio para los pobres.
El fuero para el gran ladrón.
La cárcel al que roba un pan.

Promulgación de la Ley del embudo. Canto General. Pablo Neruda

Ricard Pagés es un hombre de orden. Se ve a primera vista, impecablemente trajeado y cariacontecido. La gente de orden a  veces se despista y saquea cajas de ahorro. Lo hacen sin mala intención, sin deseo de hacer daño. Pagés y tres compinches más (Manuel Troyano, Santiago Abella y Juan Caellas), todos ellos gentes de mucho orden, fueron condenados por un "delito continuado de administración desleal". Se repartieron un botín de 30,6 millones de euros en forma de planes de pensiones. Como es habitual entre malhechores, le echaron la culpa al muerto, un tal Jaume Jorba, quien según parece les enriqueció a su pesar. Pillados con las manos en la masa no dudaron en devolver parte del pastel.
El juez del caso, José María Vázquez Honrrubia les afeó su conducta: “ se ha producido una actuación por su parte maliciosa, insidiosa, engañosa para la sociedad”. Pero a pesar de la reprimenda considera atenuante el reconocimiento de la pillería, gracias al cual los rufianes han conseguido una rebaja sustancial de la pena, eludiendo la cárcel. Aunque según comenta Ernesto Ekaizer hay cerca de 200 banqueros en este país imputados en diversos delitos, ninguno ingresó en prisión hasta la fecha. La gente de orden no merece ese destino.
A las gentes de orden les juzgan jueces de orden, y tanto el juez como el fiscal del caso Caixa Penedés consideran que “con la devolución se restaura el orden jurídico y se compensa a la víctima”. La víctima es para ellos el Banco Mare Nostrum (BMN) del que formó parte Caixa Penedés junto a Caja Granada, Caja Murcia y Sa Nostra. Por lo que se ve no recuerdan que recibió ayudas del FROB por importe de 915 millones de euros, y que el FROB se financia fundamentalmente ( en un 75%) a través de los impuestos de todos los españoles. Se que mi contribución es muy humilde, pero yo no me siento compensado en modo alguno por la decisión.
Carlos por el contrario, no es una persona de orden a pesar de que estudia medicina. Para hacerse una idea de quien es Carlos nada mejor que leer el impresionante post que escribió sobre él Juan Irigoyen. Un tipo que no se conforma con las clases del siglo XIX que con frecuencia recibe, y que forma parte activa de IFMSA o Farmacritixcs, dos movimientos admirables.
Carlos participó en un piquete informativo del 15M durante la huelga del 29 de mayo de 2012.  Junto a otras personas gritó consignas en el interior de un bar cuya dueña avisó a la policía. No hubo violencia ni destrozos. Conscientes de que no estaba realizando nada ilegal, Carlos y Carmen no salieron corriendo, y fueron los últimos en abandonar el local. La policía optó por identificar a ambos entre el conjunto de los participantes en el piquete. “Chapa y se acaba” , expresión utilizada por Carlos , es la demostración de la amenaza y coacción ejercida por los condenados, y que llevó a la Audiencia Provincial de Granada a condenarles por un delito "contra los derechos de los trabajadores" a 3.655 euros de multa y a una pena de tres años y un día de cárcel. Hace unos días, los jueces de la Audiencia Provincial han considerado que no existen “fundamentos jurídicos suficientes” en sus alegaciones, por lo que ratifican la sentencia. El fiscal, gente de orden también, había pedido una “ sentencia ejemplarizante”, y la Audiencia ha atendido su petición, de forma que las próximas semanas Carlos y Carmen ingresarán en prisión .
“Si queremos que todo siga como está, es necesario que todo cambie", escribía Lampedusa. Y todos los cambios de los últimos  30 años parece que eran necesarios para que todo siga igual. Boca ancha para la gente de orden y estrecha para los desarrapados. Como escribía Neruda, el parlamento cada día aprueba un artículo más de su particular ley del embudo. De forma apresurada aprobó la Ley de Justicia Universal para no molestar a los chinos, aunque los que se cuelen por las rendijas sean los narcotraficantes. La de Seguridad ciudadana permite conseguir el objetivo de "una mayoría silenciosa y unas minorías silenciadas" en palabras de Eduardo Sanzo, un ciudadano jubilado.
Robar 30 millones no es delito suficiente para ir a la cárcel. Gritar en un bar, sí.
(Para apoyar la absolución de Carlos y Carmen consultar Farmacritixs)

(Fotografia de Publico .es)

domingo, 25 de mayo de 2014

La política sanitaria europea perjudica seriamente la salud


Hasta los políticos más ignorantes que, por circunstancias de la vida,  acaban enredados en la política sanitaria, hacen referencia a la necesidad de que las decisiones se basen en la evidencia. La actual Ministra del ramo es un buen ejemplo. En un reciente congreso sobre dieta mediterránea acompañada por el siempre prestigioso  Valentín Fuster señalaba la necesidad de “alinear las políticas sanitarias de ámbito europeo y proteger la salud en base a la evidencia científica”.
Bien es verdad que lo de la evidencia no deja de ser un tópico útil, al que solo se alude cuando los resultados concuerdan con nuestras políticas. La ausencia de pruebas sobre la efectividad de la homeopatía no ha sido impedimento para que el gobierno español autorice definitivamente miles de productos homeopáticos por poner un ejemplo.
En los últimos meses se han publicado dos artículos, sumamente relevantes, sobre las consecuencias de ampliar la cobertura sanitaria. Ambos revisan la experiencia de la reforma de Massachussets,  y son trabajos de  grupos de investigación de la universidad de Harvard ( Harvard Medical School, Harvard School of Public Health y Brigham &Woman Hospital).
El primer de ellos , fue publicado en The Milbank Quarterly por Phillip van der Wees y colegas, y su objetivo era el de comparar las tendencias en el estado de salud y el uso de servicios ambulatorios antes y después de la reforma sanitaria iniciada en 2006 en este estado americano  (y que ampliaba la cobertura sanitaria facilitando el acceso a la asistencia sanitaria) en comparación con otros estados de Nueva Inglaterra. Utilizaban para ello un diseño cuasiexperimental con datos del periodo 2001 a 2011, y una muestra de 345.211 personas entre 18 y 64 años. Los residentes en Massachussets declaraban grandes mejoras en el estado de salud general , tanto desde el punto de vista biológico como mental. También aumentó la realización de actividades preventivas. La mejora afectaba por igual a blancos , negros o hispanos, y era especialmente notable entre aquellos con menores ingresos.
El otro trabajo es el del equipo de Benjamin  Sommers  en los Annals of Internal Medicine, en el que analizan la mortalidad por todas las causas y la mortalidad evitable por el sistema sanitario, antes y después de la reforma sanitaria emprendida en Massachussets, comparándolo con un grupo control de similares condiciones demográficas y económicas. Se analizaron cambios en tasas de mortalidad de adultos en condados de dicho estado en el periodo 2001-2005 ( antes de la reforma) y 2007-2010 (post-reforma). La reforma se asoció con una disminución de la mortalidad por todas las causas en comparación con el grupo control, y una disminución absoluta de 8,2 muertes por 100.000 adultos. También disminuyó significativamente la mortalidad evitable.
Nuevamente los cambios fueron mayores en aquellos condados con población con menores ingresos. Análisis secundarios mostraron también mejoras en el acceso a los servicios, cobertura y salud autopercibida. El NNT ( Number Needed to Treat) fue de 830 adultos cubiertos por cada muerte evitada anualmente, bastante mejor que buena parte de las intervenciones que alegremente se prescriben en este país, fomentados por la industria y apoyados por las administraciones.
Como era de esperar ambos estudios, publicados en dos de las revistas más prestigiosas del mundo, han tenido una repercusión brutal en los medios de comunicación americanos. El New York Times señalaba hace unas semanas que si se extrapolaran las disminuciones en mortalidad obtenidas en estos estudios ( 3% en 4 años) al conjunto de Estados Unidos significaría una reducción de cerca de 17000 muertes anuales. Otras fuentes elevaban la cifra a 24.000.
Estos estudios en cambio, no han tenido ningún reflejo en la prensa española, adecuadamente controlada por el poder económico-financiera dominante. El Pais , por el contrario, si se hizo eco de la información relativa a los efectos negativos que tendría para el empleo la aplicación de la reforma Obama, manipulación de datos que fue posteriormente desmontada por Paul Krugman.
Por lo tanto existen pruebas científicas que demuestran que caminar hacia la cobertura universal mejora la salud de las poblaciones; lógicamente desandar ese camino ( lo que lleva haciendo con determinación el Partido Popular en España desde hace dos años) perjudica seriamente la salud; no de los “residuos” a los que se refería Bauman, sino también de todos los que aún estamos a salvo.
La labor de un político es siempre priorizar intervenciones: elegir en que se va a gastar el dinero de los contribuyentes, a quien se va a beneficiar y a quien se va a penalizar, qué criterio se elige a la hora de decidir. La política del gobierno español , dirigida con mano firm desde la Troka, prioriza claramente intereses económicos sobre sanitarios, el bienestar del 1% más rico sobre el 99% más pobre, mejorar la competitividad a base de salarios asiáticos sobre la salud de la población española. Es una decisión completamente legítima. Que debería ser adecuadamente respondida.

(Imagen: Harvard School of Public Health obtenida vía Los Angeles Time)

jueves, 22 de mayo de 2014

Detalles que a nadie importan

No todo el mundo tiene el compromiso con sus pacientes que describía Jonathon Tomlinson en su blog, y al que nos referíamos en el último post. No resulta fácil ni cómodo atender  los múltiples problemas de un paciente al final de una mañana de trabajo estresante, manteniendo la atención, la escucha activa, la empatía. Entre otras razones por el hecho de que ese tipo de actitudes no son valoradas por las instituciones.
Por el contrario, no hay nada más estimulante para las organizaciones sanitarias que encontrar unidades de medida que les permitan cuantificar el desempeño de sus profesionales, como si fuera cualquier empresa industrial: unidades equivalentes a la cotización en bolsa de una empresa, los beneficios anuales de un banco, la producción anual de automóviles… Tocar, escuchar, comprender no son medibles y por lo tanto,  no importan.
Todos los servicios sanitarios llevan años desarrollando “zanahorias”, estímulos monetarios para que sus trabajadores espabilen y hagan lo que deben hacer. No hay organización sanitaria  que no tenga su modelo de incentivos, de pago por desempeño. Sin embargo las publicaciones científicas ponen cada vez más de manifiesto los riesgos, que implican. Varios artículos recientes ponen de manifiesto su escasa efectividad , proporcional a las perversiones que generan. Especialmente ilustrativo es el trabajo publicado en BMC Family Practice de los Institutos de Investigación en Atención primaria  de las  universidad de Keele y Manchester  en Inglaterra (entidades inconcebibles en España) en el que revisan como está moldeando las consultas el sistema de incentivos británico (conocido por Quality Outcomes Framework). Es un estudio longitudinal en el que analizan  consultas grabadas de médicos de atención primaria atendiendo a pacientes con condiciones crónicas (sobre el papel, la piedra angular de este tipo de modelos), para posteriormente entrevistar tanto a médicos como a pacientes. A estos últimos les siguen semanalmente durante tres meses invitándoles a reportar sus experiencias respecto al uso de servicios sanitarios. Pasado ese tiempo vuelven a entrevistar a los pacientes. Los resultados invitan a reflexionar: los profesionales sanitarios utilizan la consulta como un medio de “vigilancia” de los pacientes, quienes acuden pasivamente “para el escrutinio”. Las consultas de revisión en atención primaria en Reino Unido se centran en la agenda biomédica establecida por el QOF. Estas consultas son fundamentales para cumplir sus estándares  y ( sobre todo) mantener los ingresos de los profesionales. Con ese fin las consultas acaban convirtiéndose a menudo en meras sesiones de chequeo de indicadores, el clicar casillas que denunciaba Joan Gené. Los pacientes  por su parte, abandonan la consulta con muchas necesidades biomédicas, emocionales o de simple información sin resolver. Consideran que las consultas de “vigilancia” son irrelevantes e insignificantes para el manejo diario de sus problemas y sus futuras necesidades de salud, salvo en los casos de cáncer o duelo. Confirman así el temor de  Howie, Metcalfe y Walker, quienes ya avisaron en 2008 de que el ajuste a los objetivos del QOF podría desviar a los médicos de atender a cuestiones mucho más importantes que las incluidas en las planillas de control, desde tocar la tripa a atender a los  problemas que realmente importan a los pacientes.
El QOF, al igual que nuestros modelos de incentivos no premian en ningún caso la empatía, el quedarse fuera de hora atendiendo a un paciente angustiado, el ejercicio tan humano de la compasión. El QOF prevalece sobre el ethos de una atención holística centrada en el paciente. Los autores del trabajo consideran imprescindible para hacer compatibles ambos enfoques el disponer de tiempos razonables de consulta, fomentar la continuidad de la atención. Pero ya se sabe que el objetivo de la industria sanitaria no es ese, sino el de aumentar la productividad a cualquier precio: más consultas, en menos tiempo, para rellenar casillas que no significan nada.
(Viñeta de El Roto en El Pais)

domingo, 18 de mayo de 2014

Un día cualquiera

The gap between their proposals for more technology and our need for more time and human interaction seem to be getting wider than ever. 
( La distancia entre sus propuestas para disponer de más tecnología y nuestra necesidad de más tiempo e interacción humana parecen ser mayores que nunca)
Tomlinson. A Better NHS blog.

Jonathon Tomlinson es un médico general que trabaja en Londres; escribe un magnífico blog de lectura imprescindible (A Better NHS). Hace un par de semanas publicó en el blog del BMJ un impresionante post sobre el trabajo cotdiano de un generalista. Se titula 4 problemas, los cuatro motivos de consulta con los que acude una mujer joven, impecablemente vestida, al final de una mañana estresante, entre llamadas de teléfono y la atención a pacientes con muy variadas demandas físicas, psíquicas o sociales. La actitud amable de su paciente le hace albergar esperanzas de que tal vez pueda recuperar algo del retraso que lleva. Ella parece leerle la mente al explicarle que no llevará mucho tiempo solventar las cuatro demandas que lleva escritas. La primera es sencilla: renovar la prescripción de un fármaco, la segunda tiene que ver con su rodilla, en la que aparece un dolor intenso , que le impide continuar corriendo tras recorrer tres o cuatro millas. La tercera es la petición de realizar determinada analítica por parte de su nutricionista, a la que está acudiendo por sus problemas de colon irritable. Mientras ella busca en su bolso las peticiones, él revisa la pantalla del ordenador, desde donde varios chivatos le avisan de que debe preguntarle sobre consumo de tabaco y alcohol, medir la presión arterial o solicitar una citología.Frunce el ceño y apaga la pantalla para no irritarse más. Revisa las pruebas solicitadas por la nutricionista, y comprueba con irritación que apenas está de acuerdo con la indicación de alguna ,y que justificar su posición le va a llevar un tiempo que no tiene. Opta por solicitar a la paciente que se desnude para explorar la rodilla. El tiempo corre; la rodilla está caliente e hinchada. Piensa que puede haber algo más complicado detrás de esa rodilla y comienza a explorar otras articulaciones; Sospecha una posible artritis inflamatoria y decide realizar más pruebas y una consulta al reumatólogo. Tomlinson se imagina discutiendo con un imaginario gestor sentado en la esquina de la consulta y recriminándole su paternalismo y condescendencia con la paciente, y su manga ancha a la hora de gastar recursos.
Lleva ya 15 minutos de consulta; en otros quince tiene citada a una trabajadora social para discutir el caso de protección de un menor que le preocupa especialmente; pero aún hay dos pacientes esperando fuera. La ansiedad aumenta. El fármaco a prescribir es un contraceptivo; le toma la presión arterial para cumplir con el protocolo. Le extrae sangre para hacer una determinación analítica. La paciente le pregunta si podrá hacerle la analítica que pide la nutricionista, aprovechando que le va a sacar sangre. Miente al decir que no sabe si podrá realizar el laboratorio local ese tipo de determinaciones,   y se siente mal por hacerlo. Pero no quiere pedirlos, no los considera necesarios. Decide contarle la verdad y comprueba con alivio que la paciente confía más en él que en la nutricionista. Le dan ganas de abrazarle ( es el mejor momento de la mañana) , pero mira el reloj y comprueba que ya lleva 20 minutos con ella, mientras un avisador le informa de que ya está esperando la trabajadora social.
 “Hay una cosa más”, dice la paciente. El médico esperaba que lo hubiera olvidado. “Mi hermano murió en el último mes, atropellado mientras montaba en bicicleta. No puedo dormir, me paso el día llorando. No me centro en el trabajo y me preguntaba si podría tener algún día libre”. A la cabeza del médico llega inmediatamente el recuerdo de su hijo atropellado delante de él, también en el último mes; lo cercano que estuvo de la muerte y lo que hubiera sentido en caso de producirse algo tan terrible. Por supuesto responde afirmativamente, pero a la vez le propone buscar otro hueco en la agenda para poder hablar con más calma de ello, mientras su paciente llora en silencio. 
Cuando por fin sale de la consulta Tomlinson se siente enormemente triste. No solo porque imaginaba el dolor de la paciente, sino porque nadie en la política sanitaria parece entender que ese nivel de complejidad y exigencia constituye el trabajo diario del médico de cabecera. Ellos mientras tanto, siguen diseñando el “futuro de Atención primaria”, pretencioso título de una de los últimos documentos del Ministerio de salud británico. Para Tomlinson no es tecnología lo que más necesita un médico general ; es simplemente tiempo.
El próximo paciente es un anciano al que alguien había depositado en la sala de espera; se había quedado dormido; tenía la cadera rota. Atenderle implica acompañarle a la camilla, subirle a ella, desvestirle y explorarle. 20 minutos más de consulta. Cuando acaba,  la trabajadora social lleva 20 minutos esperando. El otro paciente se fue, dejando una reclamación. La tercera en un mes. 
El día de Tomlinson es un día cualquiera. Lo viven a diario muchos médicos generales en todo el mundo. Una actividad muy diversa, escasamente sistematizable, muy compleja, que requiere una disposición especial a ser muy sensible al sufrimiento ajeno. Sin embargo para algunos , no son más que consultas rutinarias, que puede hacer cualquiera.

miércoles, 14 de mayo de 2014

Unidades estandarizadas de enfermedad



" Los lineamientos de la atención médica parecen cada vez más productos de protocolos empíricos cuya naturaleza hace que se considere a los pacientes unidades estandarizadas de enfermedad. Estos protocolos no dan cabida al relato de cada individuo, a los valores, aspiraciones y prioridades de cada persona diferente y a la forma en que éstas cambian con el tiempo”
 Iona Heath

En el reciente Congreso Nacional de Atención al Paciente crónico tuve la suerte de participar en una mesa de debate con Roberto Nuño.
Aunque mis dudas sobre los medlos de atención a "la cronicidad" han sido expuestos repetidamente en este blog, se adjunta a continuación el ppt de mi intervención.
Por si alguien tuviera interés en revisar el contenido del debate , se adjunta a continuación el video de la intervención de Roberto Nuño y la mía.

domingo, 11 de mayo de 2014

El último Récord

Como señala el Diccionario Panhispánico de dudas, el término “Record” es una voz tomada del inglés para referirse a “la marca o mejor resultado homologado en la práctica de un deporte”. aunque reconoce que “se utiliza frecuentemente en sentido figurado fuera del ámbito del deporte”. La mayor parte de medios de comunicación españoles describían en los últimos días la consecución de un nuevo “récord médico”. Una vez más el “atleta” responsable de la gesta es nuestro “deportista sanitario” más reconocido: la Organización Nacional de Transplantes (ONT).
La “disciplina” en la que se ha alcanzado “el record” es la de transplante renal en cadena (según describen los medios), aunque el nombre técnico de la categoría es “transplante de riñón cruzado”. La marca, 6 transplantes.
Leyendo las entusiastas reseñas de los medios, parece que nos encontramos ante una boyante actividad industrial, que sigue los “fordianos” ( de Henry Ford) principios de la producción en cadena. El Pais lo llegaba a definir ayer como “un auténtico ejercicio de ingeniería social “.
Este moderno ejercicio de producción en cadena tuvo su embrión en la realización de transplantes de riñón a partir de la donación de un familiar cercano del paciente, ante la imposibilidad de disponer de un riñón compatible procedente de cadáver, cada vez menos disponibles (debido en cierta medida, según la propia ONT, a la disminución de muertes producidas en accidentes de tráfico). Además de ello parece ser que los transplantes procedentes de donante vivo tienen una mejor supervivencia.
Sin embargo no siempre es posible realizar el transplante del riñón de un familiar por problemas de compatibilidad, por lo que ya hace años se inició una nueva: el intercambio de donaciones entre dos parejas entre las que existe compatibilidad cruzada. Un acuerdo justo.
Iniciada la senda del intercambio altruista de donaciones, entró en funcionamiento la sistematización en cadena del procedimiento. Iniciado el programa en 2009, el programa de transplante cruzado “ despegó” en España en 2013 ,según expresión del periodista de El Pais Jaime Prats . En dicha noticia el Director de la ONT declaraba que el programa de transplante cruzado ““es un programa muy bonito, que ha solucionado el problema de la insuficiencia renal a 51 familias, pero que también ha potenciado el trasplante de vivo en nuestro país”.
El “record” de esta semana supone, en opinión del mismo Director, “un salto cualitativo importante, no habíamos pasado de cadenas de dos o tres transplantes”. Estas cadenas comienzan  en la figura del llamado “donante altruista” (lo que introduce la sospecha de que los demás no lo son), cuya desinteresada donación de riñón a un paciente desconocido, supone el inicio de donaciones sucesivas de riñones por parte de las parejas de los pacientes pendientes de transplante. En esta ocasión, según Jaime Prats , se ha contado con la participación de una nueva figura , “ el donante puente” ,quien una vez que su pareja ha recibido su riñón , “permanece hasta 15 días a la espera de realizar la donación mientras se busca el mejor destino para su órgano”. Algo que, según el periodista “introduce un elemento de incertidumbre en la compleja y ajustada maquinaria de los trasplantes en cadena: postergar la extracción, abre la puerta a que el donante se eche atrás una vez que su pareja ya ha obtenido el órgano, y rompa la secuencia”. El propio Prats señala la utilidad del “donante puente”: “Desde que se inició el programa de trasplante cruzado, las extracciones y los injertos tenían lugar de forma simultánea para que ningún donante se pudiera echar atrás una vez que su pareja había sido trasplantada. Pero esta estrategia tenía un inconveniente. La inmediatez no permitía buscar soluciones cuando las pruebas de compatibilidad de laboratorio fallaban. Por eso, las primeras cadenas no pasaban de dos o tres eslabones.”.
Es posible que esté profundamente equivocado, pero a mi un proceso de estas características me plantea preguntas que a nadie parecen interesar. Por ejemplo: ¿es esperable que cualquier persona esté dispuesta a donar un órgano a su pareja? ¿Y a su hermano? ¿ Y a un desconocido? ¿Es censurable que no esté dispuesto a hacerlo? ¿Es reprobable que una vez conseguido el transplante se abandone el acuerdo previo y se niegue a continuar en la cadena? ¿Qué ocurrirá si es así? ¿Cambiaremos la opinión, como familiares, conocidos o profesionales sobre él?Si alabamos el papel del donante altruista, ¿deberíamos fomentar en las escuelas que todos deberíamos donar uno de los riñones, puesto que por lo que se ve este órgano parece redundante? ¿O en que circunstancias debemos hacerlo? ¿Cuándo estamos desesperados? ¿Cuándo necesitemos algún tipo de compensación por hacerlo?
¿Es el proceso en sí altruista, o es interesado?

Sin duda alguna cualquier persona normal se alegrará del éxito de una operación de este tipo por lo que supone para esas personas desconocidas necesitadas de una intervención semejante. Sin embargo la presentación del proceso, el lenguaje utilizado y el aspecto al que se da énfasis ( el proceso industrial en sí mismo, con gráficos incorporados) , genera la duda de si lo importante es el paciente o son los brillantes diseñadores de la intervención, si el objetivo último es aliviar el sufrimiento o alcanzar una nueva marca.
En la disciplina en la que se generó el uso de las “records” , el deporte, lo importante no es tanto la prueba en sí, sino el deportista y la marca . Como dice Prats, “la marca a batir son seis eslabones”.
Humildemente creo que la asistencia al sufrimiento humano merece un tipo de lenguaje algo menos frívolo. Las personas no son pruebas a batir

(Imagen porcedente de ONT/Hebr Longás/EL Pais)

miércoles, 7 de mayo de 2014

La hipocresía socialista...¿o será ignorancia?

El partido socialista intenta diferenciarse de los partidos liberales y conservadores españoles, en la campaña para las elecciones europeas, insistiendo en su aparente defensa del modelo social europeo. Según señalaba el diario  El Pais,los socialistas insisten en que las políticas de recorte, austeridad y control estricto del déficit –que ellos también abrazaron en el último tramo de su Gobierno y que se intensificaron después con el PP— están enterrando el modelo europeo de Estado de bienestar. Y eso puede ser irreversible”. Magníficas declaraciones de principios. Que no se corresponden en modo alguno con los hechos.
Ayer el Congreso rechazó la moción de Izquierda Unida de someter a referéndum el futuro Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos y Europa ( El TTIP del que venimos hablando desde hace tiempo) con los votos de Partido Popular, Convergencia i Unió , Unión Progreso y Democracia y Partido Socialista Obrero Español. Algo previsible en partidos como los tres primeros (dada su ideología) , pero algo más sorprendente en un partido que dice defender el modelo de estado de bienestar, pero que a la vez es favorable a un acuerdo que facilita en grado extremo las demandas judiciales de las grandes corporaciones multinacionales contra las decisiones de los gobiernos europeos que podrían poner en riesgo sus intereses empresariales. Algo tampoco excesivamente sorprendente dada la postura pública de uno de los más influyentes miembros de dicho partido, el antiguo Secretario General de la OTAN Javier Solana.
Las condiciones y consecuencias de este Acuerdo están siendo hurtadas deliberadamente a la opinión pública en los países europeos. Como señalaba Ian Dunt en New Politics, imagina que introduces un proyecto de ley gubernamental que crea masivas sanciones económicas a cualquier política que no coincida con los intereses de las corporaciones. Será sin duda objeto de un duro debate. Pero hazlo a nivel de la Unión Europea y nadie se dará cuenta. Este seguramente es el aspecto más seductor de la Unión Europa para gobiernos y corporaciones: nadie  se preocupa de lo que haces en Bruselas…Cuando se apruebe el TTIP será el acuerdo comercial bilateral en la historia de la humanidad y apenas merece alguna mención fuera de las páginas de Negocios”.
Curioso que los euroescépticos británicos, tan celosos de defender la soberanía británica contra los ataques de la pérfida Europa permanezcan mudos ante la inevitable pérdida de soberanía que supondrá el TTIP. Al fin y al cabo la patria es el dinero.
Aún más curioso que el Presidente “socialista” francés François Hollande, ejecutor de las políticas de austeridad que marca la Troika en Francia, se apresure también a señalar la necesidad de cerrar cuanto antes el Acuerdo: “ Si no se hace así, ya sabemos que habrá un cúmulo de temores, amenazas y convulsiones”. Es preciso cerrarlo pronto, par que cuando los ciudadanos se enteren ya sea demasiado tarde. El crecimiento brutal del descrédito político les trae sin cuidado.
El partido socialista se opuso al proceso de privatización que pretendía realizar el gobierno conservador de la Comunidad de Madrid. Sin embargo, parece ignorar las consecuencias que tendría la aplicación del TTIP (o Acuerdo de Libre Comercio Estados Unidos- Europa) en esa cuestión.
Supongamos que dentro de un año vuelve a ganar por mayoría absoluta la derecha en Madrid y vuelve a introducir , ya de manera masiva, su estrategia de “externalización de servicios sanitarios”. Imaginemos que entran a participar en el negocio grandes corporaciones multinacionales americanas, suecas o británicas, a las que acaba adjudicándose la provisión de servicios sanitarios  a 40 años. Y acabemos de imaginar que un determinado día vuelve a gobernar un partido que considera que dicha política es contraria a los intereses de los ciudadanos madrileños, y pretende aprobar una ley que revierta la situación. En ese momento, si el TTIP ha entrado en vigor, cada una de las empresas adjudicatarias podrían iniciar múltiples batallas legales contra el gobierno de turno, por valor de billones de euros, en nombre de los beneficios previstos que dejarían de percibir. Pero en esta ocasión no sería los tribunales españoles los que serían competentes para juzgar las demandas. Como ha ocurrido en otros tratados de libre comercio serían tribunales de arbitraje creados ad hoc, paneles de inversores o el Banco Mundial , como ocurrió en el litigio entre Occidental Petroleum Corporation y el gobierno de Ecuador , y al que nos referíamos en el último post. El resultado de su fallo no es difícil de suponer.
Puede que todo esto sea un delirio de haber leído demasiado, como le ocurría (salvando las distancias)  a Don Quijote. Pero si es así, ¿Qué problema hay en someter algo tan importante a la opinión de los ciudadanos con toda la información por medio?

(Foto: resultado de la votación sobre la moción de IU de someter a referendum el TTIP. Tomado de un tweet de @agarzon )
Agradezco especialmente la información sobre New Politics enviada por Vicente Baos.

domingo, 4 de mayo de 2014

Lo que nos jugamos en las Elecciones Europeas

El próximo 25 de mayo se celebran las elecciones al Parlamento europeo.  La previsión de participación es la más baja de la historia, puesto que el hartazgo de los ciudadanos con los políticos es enorme, al que se une la impresión de que en Europa no nos jugamos nada. Los propios partidos contribuyen a la ceremonia de la confusión, planteando la campaña electoral en clave interna y desentendiéndose de debatir los asuntos de ámbito europeo cuya resolución tendrá consecuencias trascendentales para nuestro futuro. El más urgente ahora mismo es la negociación del TTIP ( Transatlantic Trade and Investment Partnership) , cuya existencia es invisible para los partidos participantes, incluidos los que aspiran a ser alternativa a los rancios partidos tradicionales. Dicho Acuerdo Transatlántico  de Comercio e Inversiones ( como ha sido traducido aquí) apenas tiene reflejo en los medios de comunicación, ausencia simplemente escandalosa ( únicamente Soledad Gallego Diaz ha sido capaz de analizar el acuerdo en El Pais ).
Sin embargo al asunto es crucial. Como señalaba la página web del Corporate Europe Observatory (cuyo fin es exponer a la opinión pública  el poder de los lobbies corporativos en la Unión Europea) existen poderosas razones para denunciar y bloquear la firma del citado acuerdo. Estas son algunas:
1.- El TTIP incluye la ISDS ( Investor- State Dispute Settlement), o Acuerdo sobre Conflictos entre Estados e Inversores) que permitiría a las grandes corporaciones multinacionales reclamar compensaciones monetarias multimillonarias a los estados, por políticas legítimamente establecidas por éstos en defensa de la salud de sus poblaciones o el medio ambiente, pero que podrían perjudicar los intereses económicos de las primeras, quienes consideran este tipo de decisiones una forma de expropiación indirecta. Como señala William Grader, “el objetivo último es restablecer la primacía de los intereses económicos sobre las demandas de la población”.  Gracias a acuerdos similares Phillip Morris demandó a Uruguay por las advertencias en las cajetillas  sobre los riesgos del tabaco.
2.- Los derechos corporativos suponen una forma de controlar la propia democracia. Existen pruebas de que ciertas políticas destinadas a la protección ambiental o de la salud pública han sido abandonadas ante la amenaza de recibir demandas multimillonarias por parte de las grandes corporaciones. Más que un instrumento para defender a éstas de decisiones injustas, se han convertido en instrumentos para retrasar, debilitar o destruir la regulación. Para David Schneiderman de la Universidad de Toronto “los tratados de inversión internacionales suponen la emergencia de un tipo de super-constituciones diseñados para blindar las políticas económicas de mayorías políticas”
3.- Estos acuerdos dan tratamiento VIP a las compañías multinacionales.
Los derechos que este tipo de acuerdos otorgan a éstas superan las compensaciones establecidas por las propias leyes nacionales.Como señalaba un trabajo de la London School of Economics es posible que un tribunal ISDS formalizado bajo un acuerdo de libre comercio Estados Unidos-Unión Europea podría conceder indemnización por daños a un inversor americano que nunca sería factible bajo legislación británica”.
4.- El sistema de arbitraje estado-inversor es fundamentalmente imperfecto
Dicho acuerdo viola el principio de igualdad ante la ley puesto que privilegio a los inversores extranjeros, privando del mismo derecho a los inversores o comunidades nacionales. los únicos que pueden reclamar ante un estado. De la misma forma las demandas son posibles solo en una dirección, de las empresas a los estados , nunca de los estados a éstas, aunque el daño ambiental, los perjuicios sobre la salud o la violación de derechos humanos sean escandalosos.
5.- La agenda de reformas sometida a discusión  por la propia Unión Europea hasta julio,  no afecta al núcleo duro del acuerdo
6.- El riesgo de que un estado sea demandado por una corporación es creciente, como lo demuestra  el crecimiento de litigios de este tipo realizadas en la última década
7.- El acuerdo favorece ataques subrepticios contra las decisiones de los tribunales nacionales. Buen ejemplo de ello fue la intervención de Chevron recurriendo a este tipo de Acuerdos, como forma de escapar de la condena de los tribunales ecuatorianos a pagar indemnizaciones millonarias por la contaminación brutal que sufrieron comunidades indígenas amazónicas
8.- Estos acuerdos tampoco aumentan la inversión en los países.
9.- Cada vez hay más países ( Brasil, India, Ecuador, Sudáfrica) e incluso instituciones ( FMI) que cuestionan, denuncian o suspenden este tipo de acuerdos.
10.- Existen otras alternativas posibles.
Urge luchar contra la aprobación del TTIP, para lo cual este puede ser un primer paso. . Y urge aún más identificar QUE OPINAN LOS PARTIDOS POLITICOS ESPAÑOLES SOBRE EL TTIP.
De los partidos situados en el lado derecho del espectro es fácil intuirlo. Sería importante saber si la ausencia de posición del Partido Socialista es debida a simple ignorancia ( algo habitual) o a compartir las posiciones de uno de sus grandes referentes, Javier Solana quien públicamente se posicionó a favor del TTIP.
Las consecuencias que tendría la aprobación del TTIP ( entre ellas que grandes corporaciones sanitarias internacionales pudieran demandar a gobiernos legítimamente elegidos por aplicar políticas de defensa del sistema nacional de salud ) creo que son suficientemente importantes como para determinar la decisión de votar o no, y a quien.