"Podía haber sido una leyenda. O una epopeya, si nos juntamos varios"
Amanece que no es poco. Jose Luis Cuerda.1989
En el
primer Seminario de Innovación en Atención Primaria al que asistí en Madrid,
hace ya 12 años, participaron apenas una veintena de personas, ninguna menor de
40 años, y sola una mujer, una de sus creadoras Mercedes Pérez Fernández.
Asistían entonces los altos cargos de las sociedades científicas de Atención
Primaria, quienes poco después desparecieron para no volver.
En el último
SIAP celebrado en Lima la semana pasada participaron 192 personas de forma
virtual, y 111 de forma presencial, con amplia mayoría de jóvenes y mujeres. Durante
los dos meses previos se vino debatiendo simultáneamente sobre 22 temas diferentes . En la sesión
presencial de 15 horas se dedicaron 5 a las presentaciones de 23 ponentes, y 8
a 112 intervenciones de asistentes (52% mujeres) procedentes de Perú, Chile, Brasil,
España, Cuba, Argentina, Uruguay, Mexico y Bolivia, además de realizarse tres
demostraciones culturales y artísticas.
El de Lima
hace el número 34 de los Seminarios, y ya está en marcha el número 35 que se
celebrará en Lleida en noviembre; estando programados otros dos en 2018 (en Río
de Janeiro y Zaragoza), y otros dos en 2019 (en Alicante y Quito).
A lo
largo de estos 12 años, en Madrid y Barcelona, Granada, Río, Oxford, Bilbao,
Murcia o Lima, han venido participando en ellos buena parte de los que son o
han sido referentes esenciales para entender lo que es y significa la Atención
primaria y la medicina de familia o general, y cuya enumeración sería
interminable, pero comenzando por la persona que todos seguimos considerando la
referencia fundamental de nuestro trabajo: Barbara Starfield.
Los temas
tratados han sido de tal variedad, profundidad y originalidad que darían para
más de un tratado: desde la organización de los servicios de Atención Primaria
a la coordinación asistencial, de la accesibilidad a la longitudinalidad, de la
atención domiciliaria a la equidad, pasando por aspectos tan poco abordados en
los congresos al uso como la incertidumbre y la complejidad, el error, la
inteligencia sanitaria o los pacientes que lloran.
Pero
más allá del contenido los SIAP representan algo absolutamente diferente a
cualquier otro tipo de actividad formativa profesional existente: una forma de
aprendizaje colaborativo real, que se va construyendo con el paso de los días,
entre personas que a menudo no se conocen , proceden de contextos y profesiones
muy diferentes y en el que la relevancia del participante no la da su nombre,
curriculum ni cargo sino su aportación.
No son
bien recibidos en un SIAP los figurones, los que pretenden participar solo en
la sesión presencial, creyendo que el resto se va a rendir a sus credenciales
por haber acabado teniendo un cargo o un puesto relevante. Por el contrario
acaban siendo buscadas, como si se tratara de la última sensación del Primavera
Sound, esas personas de las que jamás escuchaste hablar y demostraron durante el debate previo a la
sesión presencial un conocimiento, un talento y una originalidad deslumbrantes:
muchos de ellos están aún estudiando medicina o enfermería, o empezando su periodo
de residencia. Si hay una sesión especialmente sorprendente para mi es la del Satélite, una forma peculiar de actividad “pre-congreso” inexistente en ningún
tipo de congreso de esos de 3000 inscritos a 500 euros la inscripción.En los
Satélites ( que van por su 6ª edición) los ponentes son siempre estudiantes o
residentes, por donde han pasado parte de lo más brillante que he escuchado en
los últimos años.
Hay
veces, tras escuchar a alguna de ellas,que compruebo mi elevado nivel de
ignorancia respecto a cuestiones fundamentales, que en cambio dominan personas
que apenas están comenzando su carrera profesional: que no solo saben infinitamente
más de lo que yo sabía a su edad, sino de lo que se ahora. Personas que además
de haber leído mucho, han reflexionado, meditado y creado nuevo conocimiento
sobre ello.
Si este
milagro se hubiera producido en un país anglosajón, hubiera sido materia de
análisis en las revistas más relevantes de medicina. Si hubiera estado bajo el
control o dominio de un organismo público o sociedad científica hubiera
recibido todo tipo de premios y reconocimientos, de esos a los que son tan
aficionados todas ellas. Pero lo organizan y coordinan dos personas tan
incontrolables e independientes como Juan Gervas y Mercedes Pérez, y la
independencia en este país sigue siendo sospechosa.
Tampoco
creo que les interese a ninguno de ellos ningún tipo de reconocimiento. Mucho
más importante que éste es comprobar cómo se extiende una red cada vez mayor de
personas, de cualquier edad, procedencia, experiencia y profesión, interesadas simplemente
en leer, escuchar, reflexionar, argumentar y debatir.
Entretenimientos
cada vez más extraños.
Fotografia: participantes en el SIAP de Lima. 15 y 16 de agosto de 2017
Un honor haber compartido con ustedes, gracias :) <3
ResponderEliminarEl honor fue el mio. Muchas gracias Yasmin
EliminarCómo podemos traerlos a Ecuador?
ResponderEliminarUn placer veros en la foto de Lima. La epopeya cala y bastantes de sus maneras de hacer se contagian. Gracias por la ponderada crónica.
ResponderEliminarBuenísima conclusión, es un espacio bien particular y protegido de toda contaminación. Que sigan existiendo estos espacios. Saludos y abrazos!
ResponderEliminar:) <3
EliminarMuchas gracias Vicente. Tu formas parte importante de esto
ResponderEliminarLeer estas lineas, refuerza mucho más todo lo que me traje en el centro del pecho de este 34º SIAP. Necesitamos más!
ResponderEliminarAbrazo
Gabriela Di Croce
Muchas gracias Gabriela
Eliminarseguiremos conversando y aprendiendo
un abrazo
Primara vez que participo en un Siap presencial ,otras si virtualmente
ResponderEliminarUna gran innovación,disruptiva ,diferente y por cierto con muchos aprendizajes
Gracias a todos los que participaron