“The European Union’s competition laws are designed to help
ensure that once any service is privatized there is no way for th estate to
take it back into public ownership”
Allison Pollock
Según relató en el Congreso de Diputados el Ministro del
Interior español la Guardia Civil disparó pelotas de goma y emplearon balas de
fogueo contra los desesperados inmigrantes que pretendían acceder a Ceuta
nadando. Bien es cierto que nunca
pretendieron realmente darles, sino simplemente asustarles un poco para que se
dieran la vuelta. A resultas de tan heroica acción al menos 14 inmigrantes
desesperados murieron ahogados, tal vez debido al pavor que generó la propia
actuación de la policía. Las explicaciones del Ministro no dejan lugar a dudas: "Esos cartuchos eran de fogueo y, además, fumígenos que no funcionan en el mar
porque, al contacto con el mar, se mojan y no echan humo y, al parecer, lo
único que pretendían era, al echar el humo, intentar delimitar cuál era la
imaginaria línea fronteriza en la mar que, prolongando el espigón, sería la
delimitación de las aguas territoriales marroquíes y españolas”. Como puede
comprobarse lo importante era mantener a toda costa la integridad de las benditas fronteras aunque sea a costa de ciertos daños colaterales de color negro.
Esas fronteras, cuyo mantenimiento obliga en ocasiones a
sacrificar vidas humanas, se disolverán próximamente en materia sanitaria. Por
fin los pacientes españoles podrán elegir el país donde tratar sus dolencias. tras la aprobación por parte del Consejo de Ministros del Real Decreto que traslada a la legislación española la normativa europea sobre asistencia sanitaria transfronteriza.
Decisión de importancia crucial sin duda, para la mayor parte de los
pacientes españoles en paro, que estaban esperando como agua de mayo la
posibilidad de ir a Alemania a operarse de cataratas. No es difícil imaginar a
alguna de las familias que han agotado ya desde hace meses los subsidios de
desempleo de todos sus miembros, organizándose con celeridad para cerrar el viaje en avión, reservar la
habitación de hotel e ir adelantando el pago que, por supuesto será
posteriormente reembolsado por nuestro moderno sistema nacional de salud ( aunque no se sabe con exactitud cuando) En
este caso el espíritu de la directiva Europa es acabar de una vez por todas con
esas malditas fronteras que impedían la libre circulación de personas (
consideradas como mercancías) para recibir la atención sanitaria que las
grandes corporaciones asistenciales necesitan.. Obviamente no están incluidos
los transplantes , prestación en la que somos campeones del mundo junto al
fútbol.
El llamado Director General de la cartera básica de
servicios del Sistema Nacional de Salud, Agustín Rivero, manifiesta sin
complejo que la gran beneficiaria de la medida será la sanidad privada española
. Admite que los extranjeros en
busca de salud y sol , podrían también elegir centros sanitarios públicos, pero
dadas las enormes listas de espera se supone que no tendrán tan mal gusto..
Los principios que inspiraron los sistemas nacionales de
salud, centrados en la solidaridad entre generaciones y clases sociales
desaparecieron de la normativa europea y por supuesto de la normativa que
impulsa el gobierno y gente como el Sr Rivero. Lo que importa es que España
puede ser “competitiva” en la lucha por su cuota de “share” de enfermos, dada su
envidiable posición competitiva debida a su incomparable clima, los bajos
costes ( conseguidos gracias a los bajos salarios) y ese invento incomparable
llamado sangría.
Para David Cantarero, miembro de la Asociación de Economía
de la Salud, el impacto presupuestario
no parece que fuera a ser muy elevado. Criterio fundamental en la gente que únicamente valora lo
que las cosas cuestan y no lo que valen. Es muy posible que la aplicación de la norma europea
pudiera ser rentable para España. Para esa parte de España que considera la
salud como un negocio, hacia los cuales no deberían existir barreras fronteriza
de ningún tipo, como ya comentamos hace unos días al hablar del TTIP. Para el resto de la población,
la que se lanza a la desesperada buscando una salida desde países sin futuro, la que huye de regímenes carniceros, la que forman aquellos que
ya han renunciado a encontrar un trabajo, la norma posiblemente no suponga otra
cosa que una nueva vuelta de tuerca en el desmantelamiento de un sistema que
antaño creímos asegurado
Fotografia: Imagen tomada en Ceuta en que se demuestra que los inmigrantes tocaron suelos español según la Vanguardia
Efectivamente, la competitividad está asegurada: trasplantes, fútbol y sangría (creo que ya con denominación de origen o en vías de conseguirlo; falta el tinto de verano).
ResponderEliminarLo comentado en el post es ilustrativo del grado de hipocresía de unos dirigentes que dicen defender la vida, cuando ésta sólo parece importante en el caso de los “nasciturus”, término que se ha hecho ya célebre gracias al adelantado Gallardón.
¿A qué le llaman España, cuando hablan de su competitividad, de su salida de la crisis y de todas esas bondades? Pues parece que nos lo acaban de mostrar: a su tierra y a sus ricos (que sean corruptos o no cada vez importa menos; hay tantos…). Ya tuvimos la reconquista de Perejil, el revival del Gibraltar español y ahora estamos ante la barbarie de negros invasores. Eso no se puede consentir y por eso se les disuade, supongo que para que den la vuelta a nado y hagan ejercicio (“no les siente mal lo que han comido”, como decía el Dómine Cabra de Quevedo).
En cuanto a quienes se dicen españoles y pierden el acceso a la sanidad, a la educación y a la comida… que se reciclen al sector servicios en áreas luminosas. Por ejemplo, cantando aquello de “sé que el sol español te ha traído hasta aquí” que popularizó, también como adelantado, Luis Aguilé. Y es que lo que necesitamos ahora, más que nunca, es eso: enseñar a españolear a los turistas blancos y ricos, chapurreándoles en el inglés de Rajoy.
Gracias Javier. La situación me recuerda a las clases de Quimica de BUP cuando analizábamos la ósmosis y el comportamiento de solutos y disolventes frente a una membrana semipermeable, la que deja pasar a los segundos pero no a los primeros. Nuestras fronteras funcionan a la perfección en esta adaptación osmótica a la demografía. Pasan alegremente los capitales, y las personas que los poseen , pero son impermeables a los que llegan para huir o simplemente buscarse la vida
ResponderEliminarEsas vidas que no valen nada, frente a las de los nascituris que comentas