sábado, 12 de septiembre de 2015

Estancia media

Ramiro tiene 65 años y una enfermedad degenerativa que va minando poco a poco sus capacidades, de esas que dan miedo de la incapacidad que comportan. Trabajó toda su vida, en una amplia variedad de oficios, de barrendero a empleado en artes gráficas. Fue representante sindical, pero de los que creen que no en todas las ocasiones el trabajador merece ser defendido: ante el despido de un compañero de trabajo que fue descubierto robando el gasoil del camión de la empresa para su uso personal,  Ramiro se puso de lado de la empresa: “bastante suerte tienes con que no te lleven preso, y no figure en tu expediente”. Ramiro se perfuma cada día como si fuera ser recibido por el embajador del Japón, y siempre tiene una palabra de aliento para los pacientes con los que  se cruza por la planta. Pero las cosas de la vida le han llevado a no tener casa, ningún amigo que venga a visitarlo, nadie esperándole cuando le den de alta.
Ramiro escapó de la residencia en que estaba porque aquello era un infierno: según él, en apenas un mes murieron 20 personas y la comida era una bazofia. Además se quedaban con el contenido íntegro de su pensión, sin dejarle nada para el más mínimo capricho. Dijo que iba a la plaza Castilla a realizar unos trámites de su jubilación y no regresó, y en el fondo teme que la Guardia Civil vaya por él. 
Ramiro está a la espera de obtener una plaza en alguna de las residencias de la Comunidad de Madrid, algo bastante difícil porque cada vez hay menos plazas y más demanda. Dentro del hospital no se encuentra mal del todo, cómodo en su papel de veterano de la planta en que lleva ya unos cuantos días ingresado. La trabajadora social llega cada día para ver como van sus trámites, si hay noticias de la comunidad; le pregunta sobre donde podría acomodarse si no llega la plaza de la Comunidad. Ramiro responde que se iría a una pensión: conoce un piso por Cuatro Caminos que alquila habitaciones y le dejaría algo de dinero para sus gastos.
El alta se retrasa, pero Ramiro no se siente disconforme. Absurdamente me viene a la cabeza el indicador de estancia media del hospital, y cómo estará siendo afectado por el retraso en el alta de Ramiro. Tal vez a final de año la evaluación del servicio sea negativa, por no seguir el lema dominante en los centros sanitarios de todo el mundo, que también sintetizó Shem en la Casa deDios: “Acicalar y largar”.
Uno de los trabajos más conocidos e influyentes sobre investigación de servicios fue la comparación de entre el Servicio Nacional deSalud británico ( el NHS) y la aseguradora de moda desde entonces, KaiserPermanente, tomada como patrón oro desde entonces de lo que debe ser una organización sanitaria. Aunque muchas de las cartas recibidas por el BMJ ( revista donde se publicaron los artículos) alertaban de la imposibilidad de comparar peras con manzanas, uno de los autores de aquella serie de artículos ( el actual Director del Kings Fund Chris Ham) insistía en que lo importante era no tanto comparar sino aprender de las cosas que Kaiser estaba haciendo bien. Y según Ham y compañía  el NHS podría ahorrar hasta un 17% de su presupuesto de comportarse como Kaiser, es decir si hiciera un uso más eficiente de la cama hospitalaria: mientras que la estancia media en el NHS era de 5.08 días, en Kaiser era solamente de 3,9 días. Acicala y larga y saldrán bien tus cuentas.
Los sistemas sanitarios se parecen cada vez más a Matrix: al igual que a Neo se nos ofrece tomar la píldora azul o la píldora roja: en el mundo virtual de los que tomaron la pastilla azul viven una multitud de operarios entretenidos en rellenar interminables hojas de Excel de mil filas y 300 columnas, Controlan cada mes la evolución de los parámetros de los contratos programa como si fueran las cotizaciones del IBEX 35, en que hoy  aparece en rojo Bankinter ( los datos de la Cirugía Mayor Ambulatoria) y mañana Repsol ( la estancia media).
Si por el contrario elegiste el mundo real de la píldora roja compruebas que detrás de la estancia media se encuentra el “dato” que alimenta el Excel. Es Ramiro y su situación personal única, a veces insignificante a veces estremecedora,   pero que en el parquet de las cotizaciones del contrato programa no importa, salvo cuando rellena la encuesta de satisfacción de la fila 184 del Excel.

Nadie duda de que el sistema sanitario debe ser bien gestionado. Pero hay veces que perdemos la referencia de a que se dedica.

(Fotograma: Neo eligiendo entre las píldoras que le ofrece Morpheo)

8 comentarios:

  1. Hola Sergio:
    En Atención Primaria disponemos de un indicador peculiar, " la frecuentación". En los cinco últimos años se incluye como objetivo de la Unidad Clínica de Gestión en mi Centro de Salud la reducción de la misma.

    Los médicos y enfermeras de mi Centro de Salud hacen bien su trabajo y son responsables. No aplican el equivalente en Primaria del "acicalar y largar" de Samuel Shem que sería algo así como "ponle pegas y mala cara". Pero claro así nos va (de mal). Los que están enfermos, se sienten mal o necesitan ayuda de todo tipo vienen al Centro de Salud y encima se les acoge. No importa que sus problemas sean una amalgama clínica, social, anímica y de empobrecimiento.

    Obsesionados por la demora y la respuesta inmediata desde las unidades superiores de gestión intentan que interioricemos la prioridad de la demanda inmediata, como si todas fueran urgencias clínicas, y la banalización de la consulta clínica de medicina de familia, como si todas fueran rutina y burocracia. Un despropósito.

    Pero los médicos y enfermeras de mi Centro de Salud hacen bien su trabajo y son responsables; así que trabajan mas por su profesionalidad que por la consecución de algunos objetivos asistenciales absurdos y peligrosos.

    miguel melguizo jiménez

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    1. Muchas gracias Miguel
      Tu comentario tiene tanto detrás que no me ha quedado mas remedio que hacer un post entero

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  2. Solo una puntualización. Es "Neo", y sí, sí importa mucho, :), aunque solo te lo diga porque sepas que te he leído y comparto y te felicito por la comparación.
    En las cárceles también hay muchos "Ramiros".
    Un abrazo.

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  3. Entre Ramiro y el Ibex 35: Si, habrá que repensarse como utilizamos y hasta donde la información ( necesaria por otra parte) que sacamos de nuestras organizaciones. Sin perderle la cara a nuestros Ramiros, que son nuestra razón de ser!!..... Buenos días Gerente de mediado y buen retorno al trabajo

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  4. Las hojas Excel les encantan a directivos de hospitales, especialmente a mandos intermedios. Sus superiores prefieren resúmenes de esos datos en PowerPoint, algo que pueda “venderse” como se suele decir.
    Embarcados en una medicina industrial, se ha perdido el norte en nuestros hospitales. Ya conocemos la terminología al uso: eficiencia, calidad, gestión, tiempo medio de lo que sea, tasa media de lo que sea también, etc.
    El enfermo pasa a ser individuo muestral, perdiendo la condición de sujeto. ¿Quién no tiene experiencia próxima, en familiares o amigos, de ese lema, “ACICALAR Y LARGAR”? Puedo referir un caso concreto de alguien por quien me interesé personalmente: paciente operada de cáncer de mama, dada de alta casi de modo inmediato y que retorna al hospital en el mismo taxi que la conducía a su casa al alertarse por la aparición de un seroma (si a alguien le operan de un cáncer el día anterior parece natural que le impacte algo así). En el hospital ya no es atendida por quien la operó, sino por el residente de guardia que llamará al cirujano adjunto, el cual acabará remitiendo a la paciente a su médico de cabecera. Serán dos episodios (ahora creo que le llaman procesos a eso), o tres, según se mire, no uno: el promedio final no perturbará ningún indicador. Y todo gracias a la gestión eficiente y a la existencia de remuneración por “objetivos” (¿Cómo no va a haber objetivos en una industria o en una tienda?).
    El precariado médico y sus peculiares condiciones de trabajo, así como la ya vieja tendencia de que un enfermo hospitalizado sea de todos y no de nadie (se dice cínicamente que es atendido en equipo) facilita la acción de estos gestores tan receptivos a los “Exceles” y a lo que se aproxima a marchas forzadas, el “BigData”. Mientras tanto, Ramiro y tantos otros… no parecen haberse enterado de que nuestra macroeconomía va viento en popa y se quejan de vicio.

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    1. Cuanta razón llevas Javier. recuerdo hace dos décadas cuando me contaron que un invento lo iba a solcuionar todo: era la minería de datos o Datawarehouse, un invento perfecto en que se meterían todos los datos en la coctelera y saldría reflejado lo que realmente ocurre
      20 años después estamos igual…porque esto está lleno de historias individuales únicas.
      El caso del seroma que comentas es un estupendo ejemplo: una "magnifica" atención desde el punto de vista estadístico; un desastre desde el punto de vista humano

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  5. Magnifica entrada!!Siempre tengo la impresión de que en este bendito país no se mide y cuando se hace, no sabemos qué hacer con las medidas obtenidas .Por otro lado tampoco sabemos cómo influyen factores externos en los resultados medidos como datos finales....
    Total :tanto estudio y números para acabar jugándose al azar que pastilla tomarse.
    La humanidad - y como afecta Ramiro a la variable estancia media- acaba ganando aunque debamos maquillar los números.El problema no es tanto cuanto se nos desvíe la medida sino cuantos Ramiros haya en España en la misma situación.
    Como siempre dando en el clavo.Un abrazo.

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    1. Muchas gracias a ti
      Asombra ver el tiempo que se pierde recogiendo datos y lo poco que se obtiene de ellos. ya alertaba de ello Gervas en el 92 y seguimos igual.
      Por ejemplo, seguimos sin tener un CMBD en AP aunque no hacemos más que rellenar bobadas
      Un abrazo

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