jueves, 6 de diciembre de 2012

El liderazgo moderno

Little Hitler, don't come 'round here again
With your renegade politics, redder-than-thou-disdain
Thought we were on the same side
But with a fistful of nails and your knives from the Clyde
You're a little Hitler now
And you'll grow up heaven knows how

Little Hitler”. Tracy Thorn (Everything but the girl), 1986

El Sr. Antonio Vázquez,  Presidente de la compañía Iberia, me ha mandado una interesante carta desde algún servidor localizado en un exótico país del tercer mundo. Agradezco me haga partícipe de sus confesiones personales respecto a la marcha de la empresa que él dirige y que por lo que cuenta es un auténtico desastre (según él mismo, pierde cerca de un millón de euros al día). Por supuesto en este resultado tan nefasto él no tienen nada que ver, a pesar de que lleva siendo su presidente desde hace casi cuatro años. La culpa la tienen los irresponsables de sus trabajadores, 4.500 de los cuales irán a la calle el próximo año. La empresa ha puesto de límite el 31 de enero para que los representantes de los trabajadores acepten su “propuesta”. Si esto no se produce, los despedidos no serán 4500 sino 7000. El hecho de que éstos no tengan responsabilidades en la gestión de la compañía es un asunto menor. Me tranquiliza mucho saber que consideran una “ fortaleza “ de su compañía mi fidelidad como cliente, y que todo esto lo hacen por mi interés, que por lo que se ve consiste en reducir frecuencias y capacidad de los aviones de su compañía en los vuelos a la ciudad donde resido ( de cinco diarias a dos en aviones cada vez más pequeños).
Otro distinguido líder moderno, el consejero de sanidad de la Comunidad de Madrid Javier Fernández Lasquetty ha tomado también otra decisión innovadora, la privatización de 6 hospitales madrileños y 27 centros de salud, ante la insostenible situación económica que arrastra este región. Lleva dos años y medio de Consejero, y por lo tanto ha sido el máximo responsable de las decisiones en materia sanitaria que se han tomado en dicha región. En su opinión no hay negociación posible.
El tercer ejemplo es el del Ministro de Educación más impopular que ha tenido España. Se llama Jose Ignacio Wert y sus decisiones consiguen la oposición prácticamente unánime de todo tipo de sectores en el ámbito educativo, desde estudiantes a rectores , pasando por profesores, intelectuales o comunidades autónomas. La respuesta que acaba de dar a ello es ejemplar: “soy como un toro bravo, me crezco con el castigo”.
Un amigo mío, que participa en todas las actividades de protesta contra las decisiones en materia sanitaria de la Comunidad de Madrid , se pregunta como podemos pagar a unos políticos y gestores que reconocen abiertamente su incompetencia.
Los tres (Vázquez, Lasquetty, Wert) son ejemplos del líder español del siglo XXI.
Los fundamentos de la gestión empresarial clásica suponían que el líder era responsable de las decisiones estratégicas de la organización. Ese trabajo nunca ha sido fácil. La estrategia consiste en elegir, y el peligro de elegir es siempre equivocarte en la elección. Vázquez, Lasquetty y Wert son ejemplos de estrepitosos fracasos en el proceso estratégico de sus respectivas funciones. Parece que la “innovadora” gestión española consiste en hacer responsable al que sufre las decisiones, no a quien las toma.
Un verdadero líder en el sistema sanitario, Peter Provonost, el intensivista de Johns Hopkins Hospital  responsable de las estrategias en materia de seguridad del paciente que consiguieron una disminución radical de la mortalidad ligada a infecciones nosocomiales, señala:  “Liderazgo es la habilidad de abordar los problemas para hacer el mundo mejor. Consiste en invitar a las personas al proceso y darles ayuda para conseguir un cambio”
Allí tienen líderes, aquí tenemos aprendices de tiranos.
(Viñeta de El Roto, hoy en el Pais)

5 comentarios:

  1. Sí. Yo también recibí esa atenta carta del Sr.Presidente de Iberia. Da gusto recibir cartas personalizadas, en el ordenador de uno, de gente tan importante y que gestiona tan bien las cosas como para reconocer que le sobra gente y aviones y que gracias a eso nos fidelizarán aun más.
    De todos modos, mi líder favorito es el Sr. Wert, ahora asociado ya definitivamente a la imagen del toro bravo. Y lo es por su genialidad a la hora de decir sandeces. Pocos como él han dicho tantas tonterías en tan poco tiempo. Lo que le faltaba a este país es que la educación de su gente y su política científica fuera a ser gestionada, dirigida o como le quieran llamar por un ministro como Wert. Y así, como personaje de una película de aquéllas de Pajares / Esteso: como un toro bravo. Que alguien le dice que lo hace mal, pues hala, a hacerlo peor.
    El daño que puede hacernos ese ataque al sistema público sanitario, reiterada y acertadamente denunciado en este blog, puede ser muy inferior a las consecuencias para el país de los despropósitos wertianos, porque éstas inciden en lo más básico, en la formación de personas libres y en igualdad de oportunidades, algo que parece que se acabará si Dios no lo remedia.

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  2. No puedo evitar las reminiscencias de lo que vemos y sufrimos con las innovaciones de la privada y me hace recordar el chiste del remero.
    Recordamos la conclusión el remero es un incompetente.

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  3. Enhorabuena Sergio por escribir y describir de forma tan clara lo que está pasando. Cada entrada tuya es para enmarcar. Enhorabuena

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  4. Muchas gracias Javier. Ministros expertos en decir sandeces hemos tenido unos cuantos. Solamente el palmares del Ministerio de Sanidad es esplendoroso: Villalobos, Sancho Rof, Trinidad Jimenez, Leire Pajin, Ana Matos... Pero Wert supone una vuelta de tuerca mas: es provocar y despreciar la opinion ajena.Insuperable...de momento

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  5. muchas gracias a los dos. Si, una vez mas es el remero el que tiene la culpany no los 220 timoneles.

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