permite el trabajo de la reflexión y de la imaginación,
lo que resulta imposible cuando se sufren presiones para la rápida obtención de resultados. La madurez implica tiempo".
El artesano. Richard Sennett. 2008.
"Haces es pensar". Eso decía Richard Sennett en la presentación de su libro "El artesano" en el diario el Pais. A él nos referíamos en el último post y tal vez merezca un poco más de atención. Sennett se formó en Chicago y Harvard, aunque los últimos años de su actividad se desarrollan en Gran Bretaña de cuya London School of Economics es profesor.El lugar que ocupa el hombre en las sociedades actuales ( capitalistas por supuesto) , la declinación progresiva de su papel público, ya presente desde su libro sobre "el Declive del Hombre Público" en 1977, es una de sus principales preocupaciones, muy presente también en el Artesano.
En "La corrosión del carácter" ,una de sus obras más conocidas en España., señala en su prólogo algunas reflexiones de especial valor en estos tiempos de crisis y recortes salariales:
"A lo largo de la mayor parte de la historia humana, la gente ha aceptado que la vida cambia de repente por culpa de las guerras, las hambrunas y otras catástrofes, y también que, para sobrevivir, hay que improvisar. En 1940, nuestros padres y abuelos estaban desbordados por la angustia, eras haber resistido el desastre de la Gran Depresión y hacer frente a la sombría perspectiva de una guerra mundial."Lo que hoy tiene de particular la incertidumbre es que existe sin la amenaza de un desastre histórico; y en cambio, esta integrada en las prácticas cotidianas de un capitalismo vigoroso. Es posible que la corrosión del carácter sea una consecuencia inevitable. La consigna «nada a largo plazo» desorienta la acción planificada, disuelve los vínculos de confianza y compromiso y separa la voluntad del comportamiento".
En su último libro contrapone los arquetipos de Hefaistos, enormemente feo pero creador de joyas hermosas, a Pandora, hermosa pero generadora de la mayor parte de los males.. Sennett termina su libro considerando que "la figura de Hefaistos cojo, representa el tipo más digno de persona a que podemos aspirar".
Reconozco que son reflexiones que difícilmente pueden ponerse de moda, desarbolados como estamos por las permanentes aspiraciones a la rapidez, la inmeditez y la hormosura para toda la vida. Pero no me parece que sean malas recomendaciones: lentitud, reflexión, imaginación, trabajo imperfecto pero personal.
Para él , como comentaba en el Pais, la vida es una narración. Habrá que recuperar la importancia de la narración en nuestro trabajo.Ya hablaremos de ello.
Foto: Carmen Secanella. El pais.
"Habrá que recuperar la importancia de la narración en nuestro trabajo."
ResponderEliminarComo me gusta, esto es el poder de la palabra como fuente de sanación, el poder de la reflexión lenta.
Observar nuestra respiración, escuchar el latido de nuestro corazón ....
Tienes toda la razón Juana.
ResponderEliminarLa narración tiene que ir de la mano de la ciencia. La llamada "evidencia" la obsesión por las pruebas sirve de poco si no se integran en la narración de alguien que sufre.
Muchas gracias por tu comentario