sábado, 5 de marzo de 2011

La política del miedo

"Let not our habbling dreams affrights our souls;
Conscience is but a word that cowards use,
Devis’d at first to keep the string in awe
"
(“Que no turben nuestro ánimo sueños pueriles,
pues la conciencia es una palabra para uso de cobardes,
inventada en principio para sujetar a los fuertes”)
Ricardo III. Acto V, Escena III. W. Shakespeare

Ricardo III representa perfectamente el paradigma de la maldad. Aunque Shakespeare fue un experto en malvados, nadie hay tan depravado en su obra como Ricardo. Capaz de decir, tras seducir a Lady  Anne, sonriéndose: “ Yo que he matado a su esposo y a su padre, logro cogerla en el momento de odio más implacable de su corazón con maldiciones en su boca y lágrimas en sus ojos…y sin amigo que amparen mi causa , a no ser el diablo en persona…aún la conquisto”. Ricardo llega a ser rey y mantienen su trono eliminando a cualquiera, ya sea niño o adulto, que se ponga por delante. Construye un reino de temor ( “no tiene más amigos que los que lo son por miedo”, dice Blount). El temor es un arma poderosa.
La siempre lúcida Iona Heath, presidente del Royal College of General Practitioner,  escribía hace una semana una columna en el BMJ con el título de “la Política del temor”, referida a la reciente historia del Reino Unido, pero cuyas reflexiones podrían ser también perfectamente aplicables a España. Iona relata las incongruencias admitidas por Toni Blair con absoluto desparpajo, relativas a la guerra de Irak: sus “inexactitudes” se debían simplemente a que estaba "hablando políticamente”. Hablar políticamente parece haberse convertido en una licencia para distorsionar la verdad. El Oxford English Dictionary define una persona política como “ en sentido siniestro, alguien astutamente intrigante, artero conspirador o intrigante”. Los actuales derroteros de la política están volviendo a poner de actualidad una definición que parecía obsoleta.
La campaña de Irak estaba promovida desde el temor. Las reformas de Cameron actualmente en el Reino Unido respecto al NHS, siguen la misma senda. Según él éste se encuentra muy por detrás en resultados en salud que otros países de Europa, algo refutado por investigadores tan prestigiosos como el economista del  Kings Fund, John Appleby: al margen de que la comparación entre sistemas sanitarios sea siempre muy cuestionable ( incluso para decir que “el nuestro es uno de los mejores del mundo”,como suelen decir todas las autoridades políticas sanitarias españolas), es preciso tener en cuenta la evolución de lo evaluado a lo largo del tiempo, y en ese sentido habría que tener en cuenta la magnitud la reducción de la brecha que realizó el Reino Unido en los últimos años, precisamente con ese NHS.
En España, de forma insidiosa ,se va instalando la idea de que la situación es muy grave, de que el sistema sanitario no es sostenible, y de que, inevitablemente, habrá que ir haciendo sacrificios cada vez mayores: primero fue que la falta de dinero para suplir a los médicos de atención primaria ( lo que se acaba aceptando como inevitable, a pesar de que sí lo hay para otros gastos, mucho más discutibles), después se introduce en la agenda la posible necesidad de aumentar los copagos, aunque sea en forma de bonificaciones a los que son “buenos” y no gastan ( para que la gente vaya asumiendo lo que le espera), o se va dando por inevitable la oportunidad de aumentar la provisión privada de los servicios, sea de forma directa ( mediante la introducción de proveedores privados mucho más “eficientes”) o de forma indirecta ( favoreciendo la desgravación fiscal de los que contraten seguros privads) . Por supuesto nadie parece reparar en que España si que es el primero en el ranking del fraude fiscal en Europa, algo que todos damos por perfectamente entendible cuando vamos al dentista o al abogado ( ¡pobres profesiones perseguidas¡), algo que ningún partido político pretende abordar en serio.
Pero incluso aceptando las reglas del juego de los mercados, las cosas no necesariamente tienen por qué ser así. Heath menciona un aspecto que suele ser silenciado, tanto allí como aquí: los acuerdos del GATS (General Agreement on Trade in Services)  de la WTO ( Organización Mundial del Comercio) son de aplicación a todos los sectores salvo a los servicios ofertados en el ejercicio de la autoridad gubernamental , entre los que se incluyen salud y educación, que pueden ser prestados en condiciones no sujetas al mercado, como ocurre en Gales y Escocia. Allí lo ignoraron los laboristas y parece que los conservadores seguirán la senda., como posiblemente ocurra aquí también.
En los dos últimos años se ha ido instalando de forma progresiva pero inexorable , la idea de que el futuro que nos espera ( como países y como sistemas sanitarios) es ominoso, y que la única alternativa para sobrevivir es renunciar a muchas de las conquistas ( que no privilegios) obtenidos a lo largo de décadas. En definitiva, parece que el trabajo de generación de miedo se está haciendo perfectamente.
Heath señala que  “ los seres humanos viven sus vidas con la carga del miedo de lo que traiga el futuro; la tarea de los médicos es, tanto como sea posible, reducir esa carga puesto que el temor y la ansiedad son, por si mismas, causas de significativo sufrimiento y enfermedad”. Los  médicos también deberían tener la responsabilidad de refutar las afirmaciones políticas engañosas.

8 comentarios:

  1. magnífico Sergio.Totalmente de acuerdo. un apunte desde Cataluña.Cuando el Conseller Ruiz era presidente de una patronal de centros concertados declaró , creo que a La Vanguardia, que no se podían tener servicios sanitarios escandinavos con impuestos mediterraneos. Se asume que lo própio es el nivel de impuestos y fiscalidad , supongo que también moralidad pública, mediterraneas.
    A pesar de todo sería conveniente imponer las tesis políticas própias sín engaño. Desde la toma de posesión del nuevo gobierno catalán se insiste en el peligro que supone el déficit sanitario para las finanzas públicas.
    Nadie, ni profesionales, sindicatos , oposición ni mucho menos medios de comunicación, expone unos breves y definitorios datos que desmienten esta tesis, falsa.
    El déficit del último ejercicio catalán está entre 7 i 8 mil millones. El déficit del departamento de salud es de 900 millones poco más de un 10% del déficit. Su presupuesto , 10.000 millones , corresponde al 27% del presupuesto de la Generalitat.
    Manipulación con la finalidad creo de asustar a la gente y decidirla a subscribir una poliza privada de salud. Estaba en el programa electorla de CiU en las dos últimas elecciones autonómicas , el cheque servico para educación , sanidad y servicios sociales. Con el pánico injustificado se llega antes y sin dar la cara.
    un saludo y feliz domingo.
    Toni Agustí.

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  2. en general,estoy de acuerdo con lo que cuentas, pero si nuestro estado tiene que mantener prestaciones (llamemoslas innegociables) como la educacion, las pensiones,la proteccion social y ayuda a la dependencia, veo imperativo el recorte en la financiacion de la sanidad publica y DECIRLO -reconocerlo- no me parece asustar o atemorizar al personal, sino describir con claridad la realidad que nos espera, como mejor modo de afrontarla.
    herrerillo, twitter

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  3. Excelente texto, Mi enhorabuena.
    Un cordial saludo

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  4. Muchas gracias Antoni, tanto por el comentario por la interesantísma información que aporta.
    Muy cierto lo que comentas respecto al extraño y sospechoso silencio de sindicatos, partidos o medios de comunicación. Cuando las cifras que señalas son harto elocuentes. Como la gota malaya va calando poco a poco la idea de que la situación es insostenible.Hasta el Pais ( en un editorial cuando menos curioso) parece que da por hecho que será inevitable introducir recorte , copagos o facilidades para la provisión privada.
    Una delegación de gestores del NHS visitarán Valencia en las próximas semanas para conocer las "excelencias" del modelo valenciano. Sin evidencia alguna de la eficiencia del modelo...
    De nuevo, muchas gracias
    Un cordial saludo

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  5. Felicidades Sergio,
    Estoy de acuerdo en tu planteamiento. Creo que los profesionales tenemos una oportunidad única para resituarnos dentro del sistema y combatir esa cultura del miedo que quieren imponernos.
    LA capacidad que tenemos de poder , al menos, mantener las actuales prestaciones sanitarias y la calidad asistencial es lo que nos tiene que impulsar a salir de esta situación.
    O damos un paso al frente o dejaremos pasar esta oportuidad única.Mi pregunta es ¿Cómo?

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  6. Muchas gracias Vicgonbae por el comentario.
    ¿es sostenible el sistema? Pues depende. Teniendo en cuenta de que Estados Unidos gasta cerca del doble de su PIB en sanidad, aun tenemos margen para obtener ingresos extra, en especial si queremos dar las prestaciones que tenemos. No quiero decir con ello que no crea que no es imprescindible también que los poñiticos dejen de hacer promesas extravagantes y absurdas sin ingún estudio previo sobre la efectividad o el coste efectividad de lo que proponen. Y que por supuesto debería controlarse y racionalizar la presión creciente de industria y profesionales para introducir en el sistema cualquier prestaciónsin valorar su coste, beneficio y riesgos.
    Pero me sigue pareciendo escandaloso que seamos la primera potencia europea en fraude fiscal y nadie plantee actuar allí.
    Y que todos veamos normal que nuestros compañeros dentistas ganen el dinero que ganan con un porcentaje significativo de defraudación.
    Saludos

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  7. Muchas gracias también.
    recientemente a propósito de las innovaciones derivadas de la reforma americana en una rticulo del New England se reflecionaba sobre que o los profesionales asumen la responsabilidad de participar y liderara la reforma o acabarán yendo a remolque de ella.
    El problema es el "como" claro.
    pero una cosa es que sea dificil y otra que no sea posible.
    Se van apreciendo en el panorama señales de movimiento, pero aun son demasiado incipientes.
    pero habrá que seguir pensando en ello
    Muchas gracias de nuevo. Saludos

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